Reseña "Para ti, mi cielo" de Mónica Maier

¡Hola a todos y a todas! Hoy os traigo una nueva reseña de un libro que me leí hace unos días llamado “Para ti, mi cielo” de la autora Mónica Maier. Aunque es cortito, me ha gustado mucho porque atiende a algunos detalles que otras historias no tienen. Si quieres saber más sobre él, sigue leyendo.

Sinopsis: ¡El verano es una época maravillosa! 

Lucía, tras unos meses difíciles, en los que la familia y el amor no le han sonreído, decide dedicarse de lleno a disfrutar de las vacaciones. Playa, sol y la compañía de su mejor amiga es todo lo que necesita. Pero no cuenta con alguien dispuesto a trastocar sus planes y su mundo. 

Álex es un joven engreído, complicado y muy sexy, pero que Lucía no lo soporte no es motivo suficiente para apartarse de su camino. 

Es cierto que hay mil cosas que los separan, pero también hay otra muy poderosa que los une; la atracción incontrolable que sienten el uno por el otro. 
Así, el destino parece decidido a complicarle el verano a Lucía, más aún cuando comienza a recibir una serie de amenazas anónimas.

Opinión personal:

Antes de nada, debo decir que es la primera vez que leo una historia de Mónica, a pesar de tener en mi kindle otro libro suyo llamado “El amor no es una ciencia exacta”(Ediciones Kiwi), y me ha sorprendido gratamente por lo que me apunto éste también como pendiente de leer. Me ha gustado no solo por la historia romántica sino también porque, como he dicho antes, en algunas escenas te cuenta más de lo que hacen algunos libros, lo que lo convierte más interesante.

Me voy haciendo fan de esas pequeñas historias que, aunque son cortitas, me gustan por la frescura con la que se desenvuelven y esa magia que hace que te enganchen y la leas toda en una noche.

Volviendo a “Para ti, mi cielo”, debo decir que hay ciertos personajes que me gustan mucho y otros a los que desearía matarlos lentamente jijiji.

Comenzamos con la protagonista, Lucía. Se trata de una chica corriente que desea pasar un verano tranquilo con su familia. Su padre y su madre apenas están en casa por motivos de trabajo pero comparte un gran vínculo de apego con su hermano Diego, y también cuenta con su inseparable y alocada amiga, Sara. Hablaré sobre estos dos personajes más adelante.

Pero lo que menos se imaginaba Lucía era que su verano no sería tan tranquilo como esperaba pues, además de conocer a un chico creído y presuntuoso, se ve involucrada en distintas situaciones en las que llegará a peligrar su vida.

Por otro lado, Alex es un chico seguro de sí mismo y consciente del efecto que produce en las mujeres. Un pasado doloroso hizo que se convirtiese en lo que es ahora, por lo que no desea ninguna relación sentimental. Es entonces cuando (re) conoce a Lucía a través de  Sara, la cual es su vecina. Desde ese momento, le llama la atención pues esa niña que veía jugar hace muchos años, ha cambiado (para bien, claro está).

<<-Creo que no te había visto nunca por aquí.

-Si así hubiera sido me recordarías seguro, no soy fácil de olvidar –contestó él con media sonrisa y aire de suficiencia-. Sin embargo, yo a ti sí te recuerdo; claro que lo que veo ahora me gusta mucho más –su mirada la recorrió sin ningún disimulo-. Nada que ver con la niña larguirucha que jugaba en el patio de la casa de Sara>>.

Para el chico, esto comienza siendo un juego de atracción. Juego que a Lucía no le agrada ya que le saca de sus casillas constantemente, aunque en realidad le cuesta admitir que puede ser ingenioso y divertido si se lo propone.

<<-Me han definido de muchas maneras, pero indiferente no es uno de los adjetivos que me suelen aplicar.

-¿Y qué te parece arrogante, irritante, insufrible…?

-Me parece que el Scrabble se te debe dar muy bien>>.

Lo que tenemos claro es que Alex no se da por vencido e insiste constantemente para lograr tener algo con ella. Pero ¿qué sucederá si lo logra? ¿Es un “rollo” como él esperaba? ¿O será algo más? Hasta ese momento él sabía mantener a distancia sus emociones y mantener el control, pero ahora las cosas han cambiado.

Centrándonos ahora en el tema de la amistad, ambos protagonistas cuentan con amigos muy cercanos con los que divertirse y desahogarse en los momentos más difíciles.

Sara y Lucía son amigas desde que eran unas niñas y comparten vivencias, sentimientos pero también desgracias. El personaje de Sara me ha gustado mucho porque es de esas chicas que te dice a la cara lo que piensa, que en el fondo viene siendo una verdad como una catedral de grande. Pero no todo lo malo de esta historia le ocurre a Lucía, Sara se lleva también una buena parte de eso.

Aunque, como dice el refrán, “no hay mal que por bien no venga” y es que algo muy intenso le ocurrirá con alguien muy cercano, algo que la autora se encarga de detallarnos. No cuento más para que lo averigüéis por vosotros/as mismos/as. Pero sí os digo que tiene un papel muy importante en la historia y en la vida de Lucía, animándola algunas veces a que disfrute de la vida, y otras, advirtiéndole del peligro que supone estar con Alex (no necesariamente en una relación).

<<Ya sabes mi opinión, nena. No es de fiar. El Alex tierno del que tú hablas es como Papá Noel, primero te ilusiona pero luego te das cuenta de que no existe>>.

En cuanto a los amigos de Alex, son dos: Derrik y David. Al comienzo de la historia vemos a un Derrik misterioso, lanzando miradas frías a Lucía desde la lejanía y aconsejando a Alex de que lo mejor es que se aleje de ella. Pero poco a poco su comportamiento cambia ¿por qué? ¿Quizás había juzgado a Lucía antes de conocerla? Ese vínculo tan “de hermanos” que tienen Alex y él me encanta.

<<-Nunca lo vas a saber si no lo intentas. Hay cosas por las que merece la pena arriesgarse.

-¿Dónde queda el aléjate de ella de días atrás?

-Puede que estuviera equivocado. Mantener las distancias te garantiza no sufrir pero también te impide vivir plenamente.

-Empiezas a sonar como un artículo de la Cosmopolitan>>.

Sin duda alguna, este personaje me ha enamorado (aunque sale muy poquito en el libro jiji) así que me encantaría que Mónica nos contase un poco más sobre él en una historia y ver cómo se desenvuelve con las demás chicas. Sí, ¿por favor?

En cuanto a David, es un chico divertido que desde el primero momento congenia con Lucía lo que hace que poco a poco surja la confianza entre ambos.

Estos tres van juntos a todos lados y cuando, además, salen con Sara, Lucía y Diego, se forma un grupo curioso pero, sobre todo divertido.

Por último, he de hablar de Diego, el hermano de Lucía. ¡Ay, qué daría yo por tener un hermano así! Es inteligente, cariñoso, divertido, simpático, comprensivo, atractivo (también hay que decirlo) y, sobre todo, muy protector con su hermana y con Sara. Diego las apoya en todo lo que hacen y las cuida, tratándolas como lo más valioso que tiene. Simplemente, me encanta…

<<¿Qué es este drama? –exclamó viendo las lágrimas correr por el rostro de las dos chicas-. Esto va a acabar conmigo, las dos a la vez no. Dejad de llorar, por favor, hacedlo por mí>>.

<<Vamos, os invito a una terapia de helado>>.

Dicho todo esto, solo me queda decir que la historia me ha enganchado y me ha gustado muchísimo. Por lo que la recomiendo, no sólo por el (los) romance (s) (ejem ejem, ya no digo más) sino también porque cuando se acerca el final, la trama da un giro enorme que sorprende. Sin duda, no me lo esperaba.

Solo espero leer más sobre Diego, Sara y Derrik porque los he adorado.

¿Dónde conseguirlo? Este libro puedes conseguirlo en formato digital (no está en papel) desde la web de la editorial Romantic Ediciones, que te redireccionará a Amazon.

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Espero que os haya llamado la atención y que os animéis a leerlo. Os dejo con esta frase que me ha encantado.

<<No hay nada que no hiciera por estar contigo. Y nada que no te diera, incluso el cielo y las estrellas>>.

Gracias Mónica por esta historia.

Que tengan una dulce noche buena y felices fiestas.

Un beso.

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